El sueño en si, trataba de q Bakuman terminaba y Takagi y Mashiro se quedaban pensando en cual iba a ser la siguiente obra de Tsugumi Ohba, y esta historia era el primer capitulo... (q no tiene absolutamente nada q ver con Bakuman XD)
Bueno, la historifique un poco, introduciendo a los protagonistas antes de lo que se introducian en el sueño e.e
Hace mucho, q no ponia un cuentecin...
Bueno, sin mas preámbulos!!!!
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Y bueno, ahora q se ha terminado, tendriamos que pensar una nueva ¿no? ¿Que tipo de Historia crees q empieze?
Como Toda buen Relato, este tambien empezara con una Leyenda.
Braccio, un pequeño pueblo al sur de Italia, a la orillas del mar, rodeado por montañas, colinas y un enorme bosque. En un lugar como este, Agato Monti, un joven y prospero empresario decidio tomarse un descanso.
Agato es un hombre muy calculador. Si bien no tiene mas de veinticinco años, a escalado rn la sociedad veloz y audasmente alcanzando una posicion privilegiada y muy influyente en muy poco tiempo. Asi que, por supuesto, que no es casualidad que un hombre como él haya llegado a Braccio.
Baja del auto que ha alquilado en forma altiva. Aun si esta de vacaciones, viste un traje y un sombrero. Su larga cabellera se encuentra recogida en una coleta. Y finos guantes blancos cubren sus manos. Atras suyo lo sigue su mayordomo, Henry, cargando todas las maletas. Entran a la posada, y Henry arregla el papelerio. Sin nada decir nada, Agato se dirije a su habitacion.
Es una enorme habitacion con vista al mar. Agato se sienta en uno de los sillones que se encuentran frente al gran ventanal y obserba el agua en el horizonte.
Henry llega a la habitacion, y lo primero que hace es servirle una copa de vino a su amo. Henry conoce bien las manias de Agato. Agato saborea el vino y una sonrisa se pinta en su rostro.
"Pasame los papeles"
Henry acerca uno el maletin a su amo, y lo abre.
El maletin esta lleno de viejos escritos, y antiguos pergaminos. Agato delicadamente agarra uno y lo lee. Henry puede notar que la exprecion en el rostro de su amo toma un tiente siniestro.
"Saldremos a cenar, ¿ya has echo las reservas?"
Henry asiente.
La ciudad de Braccio se encuentra en la mitad de un gran festival, segun una leyenda antigua, un "Dios" visita la ciudad de tanto en tanto, y ya es tiempo de que vuelva una vez mas.
Para recibir al 'Dios' que decendera del cielo, los pueblerinos han abierto una parte del techo de las casas, y han preparado deliciosas cenas. En todas las familias, hoy hay pollo u otras aves de cenar, en honor al 'Dios'.
Agato no, su cena del dia de hoy consiste en un pescado recien sacado del mar, y un exquisito vino blanco.
El dueño del restorant lo mira un tanto molesto.
"Me haces cocinar pescado, hoy q decendera el 'Dios'" se queja.
Agato rie por lo bajo.
"Decender, decender" Agato se rie, como si entendiera algo que el dueño no.
Termina de cenar.
"Hora de hacer negocios"
Henry no se sorprende, su amo siempre es asi. Aun si ha venido bajo la excusa de descansar, hacer negocios fue simpre su intencion.
Henry tampoco se sorprende de los negocios que hace Agato. Aun si parecen desventajosos, aun si pareciera que solo esta contragiendo deudas, aun asi, Henry no se sorprende, porque conoce bien la manera de trabajar de su amo.
"¿Preparaste el helicoptero?" Agato pregunta.
Henry se limita a asintir, y a guiar a su amo hacia techo del hotel, donce los espera un helicoptero.
Sube, con mas cantidad de valijas de las que tenian cuando habian llegado. Muchas valijas llenas de dinero y joyas.
El helicoptero se toma vuelo y comienza a volar.
"Humanos egocentricos, que creen que saben cuando no entienden nada" Agato comienza a hablar, aun cuando no esta dirigiendose a nadie en particular él continua hablando "Solo porque es un 'Dios' todos simplemente suponen que es bueno y que decendera del cielo. Pero estan tan equivocados. Son tan egocentricos que no saben mirar con claridad."
Agato se acerca a la ventana, y observa como una enorme ola arraza con la ciudad. En su cara se pinta una sonrsisa que no tarda en convertirse en una carcajada.
"Que ingenuos, pensar que todo es como ellos creen. Los humanos son seres tan inferiores. Dios ni que dios, esa leyenda hablaba del mar."
Asi es, Agato hizo todos esos negoziados, porque sabia que esa gente moriria pronto.
Se continua riendo malevolamente, mietras repite y repite "Egocentricos humanos" una y otra vez.
A una cierta distancia, Henry lo observa. No es la primera vez, y Henry sabe que tampoco sera la ultima que su amo hace este tipo de negociados.
Henry mira a Agato con ojos llenos de dolor. "No hay nadie mas egocentrico que usted" piensa para sus adentros.
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